Una de las pocas verdades universales que encontraras en
cualquier otro es que siempre habrá un mañana.
La tierra girara cambiando de día y dejando que el sol la bañe
de nuevo a lo largo de las horas.
Aunque más que un periodo
de tiempo el mañana es más una palabra mágica o un comodín.
Pues en el mañana
vive la oportunidad de empezar ese nuevo proyecto que llevamos aplazando desde
hace tiempo.
O la excusa pare dejarlo de lado de nuevo ya que hoy no
parece el día indicado para emprenderlo.
Hacer cualquier cosa mañana siempre suele parecer la mejor
opción.
Pues el mañana también es ese hermoso mundo mágico y
misterioso lleno de esperanza.
Promesas de cambios y aventuras que no podrá saber que son
ciertas hasta que el tiempo pase.
Y aunque hoy lo estés pasando mal siempre vendrá un nuevo día
y lo que hoy parece terrible quizás mañana duela menos y quizás por fin encuentras
esa solución que tanto necesitas o aquello que tanto tiempo llevas buscando.
Al fin y al cabo siempre habrá un mañana donde el universo
hará que pase algo y todo saldrá tal y como quieres.
Así que no hay por qué obsesionarse con lo que te preocupa
hoy…
Aunque también puede ser algo oscuro.
Algo digno de ser temido.
Pues si ayer fue malo y hoy también:
¿Por qué mañana será diferente?
O, ¿cómo sabemos que la vida no tiene un golpe preparado
para ti mañana aunque hoy seas feliz?
El mañana está lleno de promesas y trampas.
Y después de todo lo que he dicho supongo que habrá quien lo
ame o lo odie.
Pues como tantas cosas en este mundo el mañana depende de
los ojos que lo miren.
Y el significado o el uso que queramos darle.
Pues, para bien o para mal, siempre habrá un mañana…